MONTERO Y DÍAZ, LAS GESTORAS DEL MALESTAR

M.ª Jesús Montero es licenciada en Medicina y Cirugía. Es la actual Consejera de Hacienda y Administración Pública y la muñidora, por parte de la Administración andaluza, del acuerdo del 2 de junio de 2016, que USTEA califica de pobre, cicatero, demagógico y electoralista.

Pero hay una información relevante sobre la señora Montero, que afecta a su biografía política. Además de su actual cargo, la señora Montero ha desempeñado cargos relevantes en la Consejería de Salud, desde 2002 hasta 2013: Viceconsejera de Salud, entre 2002 y 2004, Consejera de Salud entre 2004 y 2012 y Consejera de Salud y Bienestar entre 2012 y 2013.

Es decir, la Consejera Montero ha sido la responsable de la pérdida de trabajo y derechos de las y los trabajadores del sistema sanitario andaluz y la planificadora y ejecutora de los recortes en materia de salud y atención sanitaria en Andalucía.

Por eso, cuando a la Consejería de Educación, y a su Consejera entonces, Mar Moreno, desde la Hacienda Pública andaluza se le comunica, en 2012, que tiene que despedir a casi 6000 docentes interinos, ante la alarma que muestra Moreno, en el sentido de que iban a tener que cerrar colegios y que los docentes se iban a movilizar, la señora Montero dicen que contestó: “No te preocupes, nosotros hemos cerrado alas de hospitales y NO HA PASADO NADA”.

Finalmente, fueron despedidos 4502 docentes, que, a día de hoy, siguen sin recuperarse.

Entendemos que la conversación, mantenida en estos términos de forma casi literal, da buena cuenta tanto de la biografía política de la señora Montero, como de los planteamientos políticos del gobierno de San Telmo.

Así pues, la muñidora de este acuerdo, ha sido, previamente, la perpetradora de una parte de los recortes, de forma directa, desde la Consejería de Salud, y ahora, de forma directa también, desde este acuerdo que consolida la devolución de lo recortado en diferido y que obvia, salvo en el título, el tema de la creación y consolidación del empleo público de calidad. De hecho, es notorio que la Consejera Montero lleva con mano de hierro toda la Administración Pública, en materia de restricción de gasto, claro, pero no en materia de reorganización y redistribución. Y esto deja a algunas consejeras y consejeros sin espacio de actuación, con el consiguiente malestar político que ello genera.

Quizás haya exclamado de nuevo la consejera Montero : “Y NO PASA NADA”.

Pues sí pasa, señora Montero. Porque su “no pasa nada”, quiere decir que a ustedes, los pesocialistas, y sus colaboradores necesarios, no les pasará nada mientras sigan ganando (?) elecciones. Aunque a algunos de sus colaboradores (PA e IU) sí les ha pasado el proceso electoral por encima, con las consecuencias ya conocidas.

Pero, sobre todo, sí pasa algo y grave a la ciudadanía andaluza, que cada vez más empobrecida, ve cómo se deteriora la atención sanitaria, los servicios educativos y los servicios sociales.

Quizás, señora Montero, deba ser renombrada su responsabilidad, en términos de Responsable de Malestar. Y quizás, finalmente, sí pase algo para usted, su partido y los colaboradores necesarios del gobierno del que forma parte.

La señora Díaz y la señora Montero, finalmente, acabarán siendo las hacedoras y gestoras del MALESTAR. Qué triste modo de pasar a la historia. Gracias a ustedes, a su política y a su gestión de los recortes, Andalucía sigue siendo “la tierra más alegre, con los hombres (y mujeres) más tristes del mundo”. Son palabras de Blas Infante.

En Andalucía, a 9 de junio de 2016.